En las últimas horas se dio a conocer un pedido de captura internacional que tiene como principal involucrado a un joven de 18 años de edad llamado Alberto Carlos Mejía quien, según trascendió, habría sido liberado por un error administrativo pero el joven aún debería estar cumpliendo su condena por el homicidio de un reconocido empresario chileno. Mejía pertenecería o estaría vinculado a un grupo criminal internacional denominado “El Tren de Aragua”.

La liberación

Las primeras informaciones indican que el joven sicario que había sido condenado a prisión preventiva por el asesinato del empresario chileno Felipe Reyes Ossa en pleno centro de Santiago de Chile fue liberado por un error administrativo hace aproximadamente dos meses ya que los funcionarios, luego de un torpe encadenamiento de oficios judiciales contradictorios, interpretaron que el joven sicario debía ser liberado pese a una presunta advertencia enviada vía mail que aseguraba que el mismo no debía ser liberado.

Desde ese momento, Mejía desapareció por completo y ahora es intensamente buscado no sólo en el país sino también en países limítrofes como Argentina. Ante esta situación, desde el Ministerio de Seguridad en cooperación con Carabineros de Chile lanzaron un comunicado por medio del cual solicitaron la colaboración de la comunidad para dar con “el paradero de Alberto Carlos Mejia Hernández, quien se encuentra prófugo de la Justicia de dicho país por el delito de homicidio, perpetrado el día 19 de junio del corriente año en la comuna chilena de Ñuñoa, Región Metropolitana. Al mismo, se lo vincula directamente con la organización criminal internacional conocida como “Tren de Aragua”. Cualquier persona que posea información sobre su paradero debe comunicarse de inmediato con las autoridades a través del 911”, señalaron.

El crimen

Según pudo conocerse, el presunto prófugo junto a otros dos cómplices de nacionalidad venezolana habrían increpado a su víctima, José Felipe Reyes Ossa -de 43 años de edad- a las afueras del edificio en donde residía al momento en el que se encontraba junto a un amigo. En el instante en el que el reconocido empresario chileno salió a la calle, fue abordado por dos de los sicarios quienes lo amenazaron con armas de fuego y, luego de que ambas víctimas huyeran en direcciones opuestas, Reyes Ossa fue abordado por Mejía quien le propinó tres disparos y, uno de ellos, le dio en el cuello lo que le provocó la muerte instantánea.

En el juicio, se pudo conocer que el autor intelectual del crimen se trataría de una persona de nacionalidad chilena quien decidió contratar a un sicario para acabar con la vida de Reyes Ossa debido a problemas amorosos.