El día lunes por la madrugada ocurrió un grave incidente en la Plaza San Martín de la ciudad de Río Gallegos que involucró a un niño de diez años de edad. En el mismo, el menor se encontraba junto a su familia en el espacio verde cuando, de forma inesperada, resultó electrocutado por uno de los postes que se encuentran emplazados en el predio en una zona de alta circulación. El niño, luego de lo sucedido, quedó pegado al poste y ante la alta descarga eléctrica que su pequeño cuerpo recibió quedó tirado en el piso sin poder mover sus extremidades con normalidad para luego sufrir una serie de convulsiones.
Testigos de lo sucedido fueron el personal de la Guardia Urbana quienes, al observar la dantesca escena, llamaron a una ambulancia para que el menor fuera atendido lo antes posible. Luego de llegado el vehículo médico, el menor fue trasladado al Hospital Regional de Río Gallegos en donde fue internado en la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica del nosocomio en donde, hasta el momento, permanece internado con un cuadro de salud -afortunadamente- estable. Luego de lo sucedido, la madre del joven identificado como Theo concurrió al Palacio Municipal para anoticiar lo sucedido a las autoridades municipales al igual que radicó la correspondiente denuncia en la Comisaría Primera de la ciudad capital. Sin embargo, la Plaza San Martín permaneció abierta hasta entrada la noche con gente circulando por la zona en donde se encontraba el poste en cuestión. Afortunadamente, no hubo que lamentar más heridos.
Tras esto, alrededor de las 23:00 horas del lunes 6 de enero, la Plaza fue clausurada preventivamente. En la mañana del día martes, personal perteneciente a la Superintendencia de Bomberos de la provincia de Santa Cruz concurrió al lugar para llevar adelante una inspección preventiva -lo cual fue solicitado por las autoridades judiciales- por medio de la cual se logró localizar el poste en cuestión que causó el accidente. Por medio de dicha inspección, y según señala el informe, al momento de inspeccionar preventivamente distintas instalaciones eléctricas se llevaron la sorpresa de que había, en realidad, tres postes eléctricos energizados. Inclusive, uno de ellos presentaba un voltaje de 220V en su columna metálica, un voltaje considerablemente peligroso.
Por otro lado, se detectó que también existían irregularidades en los elementos de seguridad en el tablero principal de energía tales como disyuntores y protectores de tensión, por lo que la única protección con la que cuenta la instalación eléctrica de la Plaza San Martín es una llave termomagnética. Todo lo señalado fue colocado posteriormente en un informe y evidenciado por medio de material fotográfico.
Clausura
Luego de la inspección ocular preventiva llevada adelante por el personal de la Superintendencia de Bomberos de la provincia de Santa Cruz acompañados por personal de Servicios Públicos Sociedad del Estado (SPSE), la Policía y autoridades municipales, se determinó la clausura inmediata del lugar hasta que se completen las tareas de reparación y peritaje técnico de los postes eléctricos y el personal policial quedó a cargo del patrullaje de la zona para evitar posibles incidentes.